Pero primero unos datos de la conferencia de prensa:
- En el 2012 existían sólo 6 cervecerías independientes, hoy a finales del 2014 son ya 23.
- Entre estas 23 se producen cerca de un millón de litros anuales.
- Hasta el momento de su presentación, 15 de los 23 se han sumado a la Asociación.
- Cervezas hechas en Nuevo León llegan ya a 29 de los estados de la república.
- Aun con estos números, la cuota de mercado de las microcervecerías no llega al 0.5%
En los puntos que se van a trabajar en Microcerveceros de Nuevo León son:
- Mejorar prácticas de producción.
- Negociar insumos y la compra en volumen.
- Apoyo jurídico para establecerse legalmente.
- Promover la consistencia de producto.
- Relación entre cervecerías.
El antecedente más importante que tenemos de una Asociación viendo en favor a los intereses de los pequeños productores es, sin duda, Baja California. Es evidente para cualquiera que este medianamente metido en esta naciente industria que ellos son los que están moviendo el pandero en este momento, todo gracias a su gran nivel de producto, estas asociaciones y al acercamiento con los gobiernos locales y estatales que los han estado apoyando.
Por supuesto, esto no es trabajo de días y para llegar a ello llevan varios años picando piedra y me da mucho gusto por los productores locales que vayan a seguir ese ejemplo.
Una de las cosas que mas he escuchado de los consumidores promedio en festivales y eventos cerveceros es que ven curioso como estas empresas que, en teoría deberían competir entre ellas, llevan una relación amigable y cooperativa. Lo que estos pequeños productores han entendido es que antes de crecer como individuales deben crecer como categoría y la lucha debe ser contra el verdadero Belcebú de la industria, al Satanás cervecero, el villano que hace temblar a todos los que se interesan en involucrarse en este negocio... el IEPS.
Por supuesto que todo esfuerzo de los pequeños productores por mejorar las condiciones para todos es un trabajo loable y aunque insumos, capacitación de procesos y el apoyo jurídico es realmente importante para las que ya están y las que vengan en los próximos años, lo que realmente reflejará un cambio en la percepción del consumidor es el precio.
Actualmente, en una cerveza artesanal, el 46% de lo que estas pagando es impuesto y que en realidad castiga más al pequeño productor que a los gigantes de la industria como lo son Modelo y Cuauhtémoc-Moctezuma cuyo gravamen es considerablemente menor. El modificar esto ayudaría a una competencia mas leal y el obstáculo #1 con el que muchos consumidores le sacan la vuelta a las cervezas independientes, el precio.
Durante la presentación se mencionó muy claro, la idea no es que se reduzca el impuesto para ellos sacar mas ganancia, ya que el IEPS, al final, es el consumidor el que lo paga, sino precisamente que al verse reducido, sea mas accesible el producto. Aun con ello, hay que dejar claro, que difícilmente los precios serían tan económicos como los productos de los dos grandes productores nacionales simplemente por las escalas de producción, pero esa gran diferencia que existe ahora se vería reducida y seguramente su cuota de mercado crecería.
Esto sólo es el comienzo pero lo importante es que ya inicio y que los objetivos no se pierdan, que el grupo trabaje en conjunto ya que si queremos que esto funcione y crezca, hay que ser menos como los cangrejos y más como las tortugas.
- ¿Cómo las tortugas?
- Como las tortugas
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Eslem Torres
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarO sea que al comprar una cerveza de $50 pesos, $16 pesos no van a dar a las manos de ninguno de los involucrados en el proceso de producción, distribución y venta de la cerveza, sino que llegan derechitos y sin tocar baranda a las manos del gobierno. No, pues chido.
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