Para el tercer día despertamos
temprano para uniformamos e irnos la que yo llamo “La Catedral de Nuestra
Señora de Stone”, pero antes y como lo dicta mi rutina matutina tenía que ir
por un café, del que fuera, hasta Andatti del OXXO porque sin cafeína no
funciono. Para mi fortuna y los que si se levantaron temprano el buen Mike de
Amante de la Buena Cerveza nos tenía una sorpresita, un café con piquete ¡Y QUE
CAFÉ! Era una Beer Geek Speedway, colaboración entre AleSmith y Mikkeller hecha
con el famoso Kopi Luwak, sí, el café que se come la zarigüeya y luego lo
desecha y se vende carísimo, ese mero porque ya saben #exótico, #finos. Algo
ruda para empezar la mañana pero no por menos deliciosa.
Subimos al shuttle de la diversión y tomamos camino rumbo a Stone Brewing
Company.
Llegamos unos minutos temprano
por lo que nos pusimos a hablar sobre las puertas a los jardines del Edén, les
platiqué a unos sobre la piedra de fumar y sobre la cerveza que hicieron para
construir la pared de donde estábamos ya saben, puros datos para hacerme el
interesante. Se dieron las 11am en punto y las puertas se abrieron ¡Y NOS
VOLVIMOS LOCOS! Directo a la tienda de suvenires a echar el ojo cuando llegó
Nickie Peña quien amablemente nos dio el tour por las instalaciones de la
cervecería, contándonos de los proyectos que tienen, cervezas que piensan
lanzar y sobre su crecimiento en la industria. Desconozco la cantidad de
fermentadores y la capacidad pero estoy seguro que Stone Brewing Company es la
más grande que visitamos y mira que Green Flash no es pequeña.
Después del tour en las
instalaciones de Stone regresamos a la tienda de suvenires donde también están
las cervezas para probar after tour,
en primera nos tocó Stone Go To IPA, una de las pocas session IPA que me ha gustado y que agradecí mucho para ser la
primera, siguió Pale Ale 2.0, la actualización de la primera cerveza que manejó
Stone Brewing Company cuando inició ahora con lúpulo alemán y a mi gusto una
Pale Ale mucho más clásica, menos agresiva pero a mi gusto no algo que pediría.
Siguió la clásica Smoked Porter que me gusta mucho más probar aquí porque el
ahumado es mucho más notorio por alguna razón que las embotelladas que nos
llegan a Texas ¿será el viaje? ¿El tiempo? ¿La paseada de las botellas?
Desconozco. Terminamos con la Delicious IPA, una cerveza diseñada para ser
reducida en Gluten lo cual me parece una idea estupenda pues si me han tocado
clientes que son celiacos y pues nunca sé que puedo ofrecerles sin
perjudicarlos, unas notas muy curiosas a limón y menta que me daban antojo de
mezclar esta cerveza con un mojito pero eso era antojo.
Nos pasamos al restaurante para
comer y seguir bebiendo. Aunque estamos en el Stone Brewing World Bistro &
Gardens tienen una carta de cerveza invitadas en barril y botella que no le
envidiaría nada a otros bares de la ciudad así que para acompañar mi comida
pedí la Stone Saison y de paso una Supplication de Russian River porque ¡PUCKER
UP! (y no es broma, nomás de escribir Supplication de Russian River se me está
haciendo agua la boca). En serio, probé bastantitas Sour en este viaje y el
balance, complejidad y equilibrio de Russian River no lo encontré en ninguna
otra.
Agradecemos un chingo a Nickie
por todo los que nos apoyó para este tour y por las cervezas que nos obsequió,
ya me las quiero tomar.
Pasamos a la tienda a resurtir
cervezas, playeras, gorras, vasos, lo que se nos pegara en el camino, subimos
al autobús y nos dirigimos a otro clásico, Lost Abbey / Port Brewing o como me
gusta llamarla “La Capillita de San Mongo el Gato”.
La verdad es que mucho de lo que
estaba en la pizarra ya estaba OUT así que me quedé con las ganas de probar
mucho de Lost Abbey que no había probado pero aproveché que estaba su House
Wild, nada mal. Ya para no perder costumbre pedí un sampler de Older Viscosity
(porque no venden media pinta) y una media pinta de Serpent’s Stout para
sentirme en el mood eclesiástico.
Aquí entró otra sorpresa, tomamos
el Autobús Mágico hacia una cervecería no planeada… Toolbox Brewing Company la
que fue sin duda mi crush del viaje, lástima que no todos pensaron lo mismo. Esta
cerveza tiene poco en el mercado local y es la primera cuya producción está
dedicada 100% a hacer sour ales. Este tipo de cervezas ácidas son difíciles de
encontrarles el gusto sobre todo a los mexicanos que somos de un paladar tan
dulcero (no por nada somos el país que más consume refresco) pero una vez que
les encuentras el gusto es difícil dejarlas once
you go sour you’ll never go back. Mi favorita fue la X-Lupus, una Blonde
Wild Ale con blueberries, imperdible. Mención especial para la Peachin’ Camaro
la cual Mudo fue el único en entender la referencia pero que no estaba nada,
nada mal.
Regresamos a nuestro itinerario y
paramos a la última cervecería que visitaríamos en San Diego, Belching Beaver
Brewery la cual hemos mencionado un par de veces por su Peanut Butter Milk
Stout o como me gusta llamarla “la cerveza que sabe a los Reese’s” por lo que
me pedí una de esas en media pinta y otra media de su Berliner Weisse, para
seguir con la temática de lactobacilos. La verdad es que ya estaba sintiendo el
rigor de este maratón por lo que me fui al patio a sentarme a mis anchas, beber
mi cerveza y creo que en algún momento me quedé dormido pero si no lo recuerdo
no pasó.
Después de fotos con el señor
castor tomamos el autobús de regreso porque ya era hora de despedirnos de San
Diego y empezar la noche en Tijuana.
Llegamos a nuestra tierra, a
México, nuestro México pisando base en El Tigre Bar para seguir probando
cervezas locales, algunos nos brincamos al tasting room de Fauna que estaba
literalmente a la vuelta cuya Saison con Brett se notaba muy sabrosa, pero ya
no podía darle más que un sorbo y me rendí y me puse a rezar por ustedes
condenadotes. Ya para no romper la tradición pasamos a cenar al Sótano Suizo
donde muy a nuestro pesar no había cerveza de la casa pero igual le entramos
con singular alegría a su famoso Sótano Dog.
Bebidos, cenados y evidentemente
agotados nos dirigimos al hotel para descansar y con la misma amenaza de que el
autobús sale temprano, estén o no despiertos porque al día siguiente partíamos
a un nuevo escenario para el tour, Ensenada; pero de eso platicamos mañana.